lunes, 18 de mayo de 2009


Hace un rato se murió Mario Benedetti.

No puedo escribir mucho. Tampoco puedo hablar mucho. Es que me duele tanto.

Yo sé que estaba viejito y enfermo. Pero son esas cosas que una nunca espera. Y aunque suene irracional yo nunca pensé que se iba a morir de verdad.

Mi mamá me dice que es como si no se hubiera muerto, porque nos dejó tantas cosas. Dice también que Benedetti es como un compañero de toda la vida. Siempre hubo algún libro de Benedetti que nos acompañara, algún poema.

Mi tío me dice que todos llegamos al final; lo importante es cómo. Pero también me dice que hoy somos todos más pobres y estamos un poquito más solos.

Nada. Estoy muy triste.

Te vamos a extrañar mucho, Mario.

Salud.

sábado, 9 de mayo de 2009

Preguntas porcinas...

Voy a confesar un “guilty pleasure”, un placer culposo, una de esas cosas que me gustan pero de las cuales no estoy muy orgullosa, sobre todo porque a veces me paso de rosca: me gustan las teorías conspirativas.

Y ojo que esto es desde chica, eh. No es una cosa de ahora, no. Desde los ocho o nueve años, cuando tuve acceso por primera vez a un libro sobre OVNIS*, extraterrestres y esas cosas, me fascinaron todas esas teorías sobre Roswell, el Área 51 y el ocultamiento por parte del gobierno de los EEUU de todo un corpus de conocimiento sobre vida extraterrestre.

Ni que hablar que era fanática de los “X-Files” (“Archivos X”, “Expedientes Secretos X”, dependiendo de la traducción). Era tan fanática que en una época, cuando yo tenía 12 o 13 años, mi madre me grababa los episodios que daba el Canal 12 muy tarde en la noche, para que yo los viera al otro día de mañana. Mitad para que yo no me acostara tarde y mitad porque yo era muy fanática sí, pero me cagaba toda con algunos capítulos y después no podía dormir, así que prefería verlos a plena luz del día…

La cuestión es que mi gusto por las teorías conspirativas no solo se ha mantenido en el tiempo sino que creo que se ha sofisticado un poco. Un poco, tampoco una barbaridá. Sigo creyendo que “el gobierno niega tener conocimiento” y que “la verdad está ahí afuera”…

Pero los extraterrestres y los OVNIS han cedido un poco de espacio, y su lugar ha sido acaparado por las teorías de corte más político-económico.

Es así que me he visto fascinada con la película “Zeitgeist” y su secuela “Zeitgeist: Addendum”, y con el movimiento que se ha formado alrededor de ella. O con “Fahrenheit 9/11”, por citar algunos ejemplos.

Y ahora, en esta nueva coyuntura que nos toca vivir a los seres humanos, no puedo con la condición. Es más fuerte que yo. Hay preguntas que se agolpan en mi mente, bregando por ser expresadas y esperando (sin mucha esperanza, a decir verdad) una respuesta, o dos, o media aunque sea. Éstas son mis pregutas:

• La gripe porcina, ¿existe de verdad o es puro cuento?

• En caso de que sea puro cuento (que es lo que me conviene a efectos de saciar mi sed de nuevas teorías conspirativas): ¿quién inventó el cuento? ¿Quién se beneficia con la paranoia generalizada de la población mundial que tiene acceso a los medios de comunicación?

• En el caso de que alguien se beneficie, ¿se trata de un fabricante de barbijos o tapa-bocas? ¿Uno o más laboratorios farmacéuticos? ¿Acaso los gobiernos de algunos países? ¿De cuáles?

• Si se trata del gobierno de algunos países, ¿no será que están queriendo distraer la atención de la crisis económico-financiera actual y de sus nefastas consecuencias? ¿Será que esos gobiernos (o algunos de sus integrantes) tienen acciones en los laboratorios antedichos y no querrán que se fundan y por eso inventan el cuento de la gripe porcina?

• Ya que los medios de comunicación en general y los informativos en particular le dedican no menos de diez minutos por día al asunto y están taaaan interesados, ¿no está haciendo falta algo? Digamos… entrevistas a los infectados ya curados o a sus familiares y/o amigos… Si le afanan a una vieja le hacen entrevistas a la vieja, al vecino, a la amiga de la vieja, a la hija y hasta a la lorita. Y sin embargo cuando se trata de una epidemia que ya lleva a cuestas unos cuantos fiambres y que se contagia de mirar nomás, no ha aparecido ni un solo enfermo que dé su testimonio… Dale Martín Sarthou, fuiste corresponsal de guerra ¿y me vas a decir que no te animás a viajar hasta Mexico y hacerle una entrevista a un infectado?

• Al final, ¿el chancho tiene algo que ver o no? Porque según el comunicado del Ministerio de Salud Pública la gripe porcina no se transmite chancho-cristiano sino cristiano-cristiano. Para mi que al pobre bicho le están endilgando culpas que no son de él.

• ¿Qué pasó con el resto de las enfermedades que hasta hace unas semanas nos tenían con el corazón en la boca? ¿Alguno se acuerda del dengue o de la fiebre amarilla en la frontera Uruguay-Brasil? Por no decir que ya nadie habla del VIH, o esas enfermedades prevenibles o curables que hace décadas vienen haciendo estragos en la población más pobre del planeta…

• Por último, pero no menos importante: ¿Hay vida en Egipto? ¿Qué hay después de la muerte? ¿Gonzalo Aguirre es un enviado extraterrestre? Julia Möller, ¿es o se hace? Es cierto que estas preguntas no tienen nada que ver con la gripe porcina, pero igual me retumban en la cabeza.

Si alguien tiene alguna información o gusta como yo de las teorías conspirativas, no dude en comentar. “I want to believe”…

Salú.

*Según Dolina, "OVSNIS: Objeto Volador, Señores, No Identificado"

sábado, 18 de abril de 2009

El tuerto que habla.

El día jueves 9 de abril, durante la Semana Santa, Criolla, de Turismo, etc., hubo un personaje de nuestra “forrándula” vernácula (formada por políticos, periodistas, actores sociales, etc.) que apareció en los medios en repetidas ocasiones, más que nada por las fechas que estábamos viviendo. Estoy hablando del Obispo de Montevideo Monseñor Nicolás Cotugno.

En una entrevista en particular, el periodista de Canal 10 una vez más, y como si no hubiera sido suficiente con todas las veces que Cotugno se ha expresado al respecto, le preguntó su opinión acerca de una posible despenalización del aborto en la próximo período de gobierno.

Más allá de que yo en lo personal esté a favor de la despenalización del aborto y de que desprecie a Cotugno, me gustaría hacer referencia a algunas apreciaciones que hizo este buen señor con respecto a la Democracia en general y a la uruguaya en particular. Aviso que estas apreciaciones no han hecho más que acrecentar mi desprecio por esta persona.

El tipo dijo algo así (y si alguien más lo vio le pido que me corrija si le estoy errando): “La Democracia es maravillosa. Pero no es la fuente de la verdad ni de los Derechos Humanos. Un tuerto ve más que mil ciegos, y esos mil ciegos no pueden decidir sobre qué esta bien y qué está mal.” Todo dicho con su particular acento (¿Italia del Norte, tal vez?).

No es mi intención en este artículo discutir sobre la conveniencia o no de la despenalización del aborto, ya que ya lo hemos hecho en otras oportunidades. De todas formas estoy abierta a la discusión si fuera necesario.

Lo que me interesa es prestar atención a la idea de Democracia que postula Cotugno. Para eso pueden vichar la definición de Democracia de la Real Academia Española o en la Wikipedia; digo, si todavía queda algún despistado que no se enteró de lo que es la Democracia.

Pues bien, según la metáfora de don Nicolás, el Pueblo, quien ejerce la soberanía (en lo ideal al menos), está conformado básicamente por una manga de “ciegos” (nosotr@s) que no pueden ver ni decidir qué está bien y qué está mal.

A mi me parece que a don Nicolás se le chispotea, se le olvida que gracias al Pueblo organizado democráticamente en un Estado laico, él y todas las personas tienen (en lo formal, al menos) el derecho a profesar su fe o a no profesar ninguna, a reunirse y realizar sus ritos, a vivir como cristianos, judíos, musulmanes, umbandistas, budistas, taoístas, etc., sin ser perseguidos, sin ser discriminados. Eso es lo que hemos elegido los ciegos, sabiendo que es lo mejor que tenemos pero con la convicción de que puede y debe ser perfectible, o al menos mejorable.

Ahora, siguiendo con la metáfora de Monseñor, ¿quién es el tuerto? ¿Es acaso Dios? ¿La Iglesia Católica Apostólica Romana? ¿Él mismo?

Si es Dios, se les va todo el cuento de la perfección al carajo, por varios motivos, pero especialmente por lo de “tuerto”. Y si Dios nos hizo a su imagen y semejanza, ¿Por qué no somos todos tuertos, entonces?

Si es la Iglesia Católica, bueh… ¿Qué se puede decir de una institución que patrocinó el Santo Oficio? ¿Qué se puede decir de una institución cuyo máximo jerarca en la Tierra es un ex nazi?

Si es él mismo, me parece que se pasó de soberbia. Ojito Nicolás, que si de casualidad estás adjudicándote esas superioridades sobre el resto de los mortales, va a venir un señor muy malo y te va a llevar para que ardas en el tercer círculo, si es que no te vas derechito a la Dirección, con el mismísimo Director, don Lucifer…

No sé a ustedes, pero a mí, los comentarios de esta persona me sonaron a justificación de la monarquía absoluta, o de cualquier régimen autoritario. Me parece una macana que los medios de comunicación se le dé espacio a este tipo de apreciaciones. Me dirán que como esta es una Democracia ese espacio es válido. Pero yo creo que en una verdadera Democracia los medios deberían dar lugar a quiénes tenemos ideas opuestas a las postuladas por Monseñor, pero la verdad es que no vi ninguna entrevista de ese tipo.

Debe ser que esta no es una verdadera Democracia.

Por eso escribo esto. Tal vez sirva de algo; probablemente no sirva para nada. Pero no me molesta intentarlo.



domingo, 29 de marzo de 2009

Carta abierta de los cuatro compañeros procesados.


A continuación transcribo una carta abierta que escribieron los cuatro compañeros procesados por los incidentes en el Senado. Suscribo a sus interrogantes.

Carta abierta al pueblo en general:

¿Quién dijo que somos todos iguales ante la ley?


Los sucesos a acaecidos en los últimos días no nos permiten dejar pasar la ocasión para expresarnos, somos los 4 militantes procesados por atentado en el marco de la agresión que sufrimos en las barras del senado cuando se votaba la Ley de Educación, hecho que todos recordaran ya que la prensa se encargó de criminalizarnos sistemáticamente. El proceso no fue el único castigo, el mismo fue acompañado de la obligación de realizar tareas comunitarias durante varios meses, sanción que al momento estamos cumpliendo. Obviamente, no estamos para nada conforme con la resolución judicial, ya que se ha cometido una injusticia contra luchadores sociales. Pero en fin, esto correrá por los carriles que deba correr y mientras cumplimos con lo dictado por el juez. Dicho dictamen fue aplaudido desde los grupos de poder y en particular los medios de comunicación
Los sucesos a los que nos referimos tienen que ver con la pelea en la cámara de diputados entre el frenteamplista Álvaro Vega y el nacionalista Sergio Botana, éste con porrista incluida (Obviamente mucho menos mediático que los sucesos del año pasado).
Sabemos que no conseguiremos cambios en nuestra causa ni nada por el estilo con esta carta, pero son varias las interrogantes que nos surgen:
Estos diputados, ¿dónde cumplirán tareas comunitarias?, ¿Serán citados a algún juzgado?, ¿Serán criminalizados por todo el sistema como patoteros?, ¿Les prohibirán la entrada al parlamento? ¿Algún periodista sensacionalista de policiales pedirá cárcel para ellos?, ¿Nin Novoa va a hacer alguna denuncia, o simplemente no los va a dejar entrar a su Taberna por algún tiempo?.
La opción de barrer debajo de la alfombra por parte del poder político y los medios de comunicación frente a este hecho, reafirma que nuestra sanción fue parte del proceso de criminalizar y judicializar a los que luchan y no aceptan las imposiciones.
Nuestra voluntad de seguir luchando por una educación pública autónoma y cogobernada al servicio de los sectores populares continúa más firme que nunca. En ese sentido es que convocamos el próximo martes 24 a las 13 horas a acompañar a los docentes de secundaria al juzgado de Bartolomé Mitre, donde se enfrentaran al poder judicial que buscara criminalizarlos a partir de la ocupación de Liceo 62 el año pasado.

“Construiremos un mundo nuevo, porque llevamos un mundo nuevo en nuestros corazones”

Luisina, Marco, Camilo y Marcelo

sábado, 28 de febrero de 2009

¿La revancha de las mujeres?

Estos últimos días he tenido la oportunidad de ver, de a pedazos, algunos capítulos de la nueva telenovela de Canal 10, llamada “Victoria”.

Durante mis años liceales, mis profesoras de Literatura me enseñaron a prestarle especial atención a los nombres de los personajes de las obras que analizábamos, y más si estos nombres formaban parte del título de la obra, pues parece que el nombre del personaje nos puede decir mucho sobre ese personaje, sobre su personalidad*.

Así, más allá de su significado estricto, un nombre en el cual predominan las vocales y las consonantes de sonido “suave” (por ejemplo, “Alicia” o “Luciano”) indican una personalidad tendiente a la suavidad, la ternura, lo liviano, lo etéreo, lo lúdico, etc.; mientras que los nombres en los cuales predominan las consonantes (como “Fernanda” o “Bruno”) revelan una personalidad más terrenal, práctica, fuerte, severa y dramática.

Eso es lo que decían mis profesoras, y yo debo decir que concuerdo bastante. Sobre todo porque mis profes no eran ningunas taradas, y más que nada porque las obras que analizábamos en el liceo estaban escritas por unos tipos que tampoco eran ningunos tarados, sino que más bien andaban volando.

Claro, cuando me encontré con el aviso publicitario de esta telenovela, que dice que es “la revancha de las mujeres”, en lo primero que pensé fue en su título. Me pareció más que obvio que el tipo que escribió este guión eligió ese nombre por motivos evidentes: es el nombre de la protagonista y además su significado es bastante claro.

Así que ta, en un brote feminista de lo más naïve, me dije “¡Opa, ésta va a estar buenísima! ¡Por fin una novela en la que la protagonista no es una pobre desharrapada que se enamora de su hermoso, sensible, caritativo y rico patrón! ¡Por fin una novela en la que la protagonista es una mujer fuerte, independiente, libre, pero a la vez amorosa, tierna, afectuosa con sus seres amados! ¡Una mujer completa por sí misma, que no necesita de un hombre para ser!” y bla, bla, bla.

A veces soy tan crédula, por no decir que soy flor de naba.

La cuestión es así (por si hay alguien más inteligente que yo que no haya cedido a la tentación): una mujer madura, después de 25 años de matrimonio y tres hijos, se entera que su marido le es infiel, y por si fuera poco la tercera en discordia es bastante más joven. Ahí se desencadena el drama de esta señora: “que sí, que no, que si la dejás, que si te dejo, que si me dejás, que qué van a decir de mí mis hijos y mi distinguido entorno social, que si me divorcio, que si te vas te irás solo una vez, que qué caro que está el boniato y estas hortensias de mierda que no me quieren dar flor…”

Y además de todo, esta mujer tiene tres hijos (dos gurisas y un botija) con sus propios problemas; una madre que es una yegua castradora; un ex marido imbancable; y como si no fuera suficiente, un muchacho veinte años menor que le arrastra el ala.

Y es en este último punto** en donde yo tenía puestas mis más ingenuas esperanzas. Porque si esta es “la revancha de las mujeres”, yo estaba esperando que a la primera de cambio Victoria se pegara una revolcada con el pendejo y que dieran rienda suelta a su lujuria y sus más bajos instintos.

Pero no. Resulta que me engañaron vilmente. O esta no es “la revancha de las de las mujeres”, o los autores no tienen muy claro lo que significa la palabra “revancha”***, o Victoria es una pacata reprimida, que tiene a flor de churro adelante y se hace la frígida, no vaya a ser cosa que el tipo piense que una tiene el sí fácil, o que una es una loca descocada que le gustan “esas cosas”.

Victoria: ¡me tenés podrida! ¡El guacho muere de amor por vos! ¡No te hagas la cosa que a vos también te gusta! Me cacho, gente grande y con tantas pavadas…

Flaco favor nos hacen estas novelas que ponen a estas mujeres como ejemplo de mujeres liberadas y qué se yo... Con decirte que Sor Juana Inés de la Cruz es mucho mejor ejemplo…


*No sé si los personajes de una obra literaria pueden tener personalidad en el sentido psicoanalítico del término. No lo dudo; simplemente no lo sé.

**Si yo fuera Dolina, y Rolón me preguntara “¿Cuál?”, yo le respondería “Éste, el veinte años menor…”

***Según la Real Academia Española, “revancha” significa “desquite”.

miércoles, 28 de enero de 2009

Elogio del SPM


Siempre creí que era un invento, una tara de mujeres reprimidas que vivían sus procesos fisiológicos naturales como impuros o vergonzantes, mujeres que somatizaban esas vergüenzas y esos pudores a través de síntomas físicos de variada índole. También pensaba que era una manifestación del leve retraso mental de algunos hombres machistas, que justificaban sus múltiples limitaciones a la hora de relacionarse con una mujer a través de la invocación de “esos días”.

Debo reconocer que yo escupía para arriba.


Por si alguien aún no se ha dado cuenta estoy hablando del síndrome pre-menstrual (SPM) y de la menstruación misma, así que si hay alguien leyendo esto a quien estos temas le resulten ofensivos de alguna manera; a quien no le interese en absoluto; o a quien, que una mujer hable o escriba libremente sobre estas cuestiones, le parezca la demostración más cabal de que al mundo le falta un tornillo (“que venga un mecánico”, como cantaba Gardel), que ya no hay valores ni moral, que la juventú está perdida y toda endrogada, se puede ir tranquilamente, sin necesidad de que siga leyendo y sin necesidad de comentar nada. Después no se aceptan reclamos.
Hecha esta aclaración, prosigo.

Pues bien, hasta hace un tiempito, yo no sufría de SPM. Como expliqué más arriba, incluso desconfiaba de su existencia. Hasta que, hace alrededor de dos años, me di cuenta que yo también lo padecía. Y me di cuenta porque me puse a llorar por una pavada que en cualquier otro día del mes me hubiera sido totalmente indiferente. Y ahí supe que eran las hormonas llorando (buen Dark Knight, si aún sigue leyendo, es bajo su propio riesgo).

Y la verdá que el SPM no es joda. Una anda toda hecha pelota, inflamada, dolorida, con cólicos, congestionada, una porquería. Y además una anda hiper-sensible, llorona, con la autoestima “felpudo”, insegura, reclamando aprobación, demandando mimos, pero a la vez clamando que nos dejen tranquilas y reprochando que nadie nos entiende, especialmente “los hombres”. Y a la vez es uno de los momentos del mes en que la libido está más alta, y es cuando más ganas tenemos de tener relaciones sexuales, lo cual a veces no es posible, o por lo menos incómodo, por razones varias. Bueno, esto es lo que le pasa generalmente a las mujeres que pasamos por el SPM; puede ser que no le pase a todas.

Además, con la cuestión de la menstruación se suscita un fenómeno por demás interesante: cuando varias mujeres viven juntas o pasan varias horas al día juntas, en el trabajo por ejemplo, sus ciclos menstruales tienden a “ajustarse”, de manera tal que sus menstruaciones llegan en la misma fecha, días más, días menos. Los y las que vivimos con más de una mujer sabemos cómo es eso. Los que no viven con mujeres imagínense tener a una fémina padeciendo los síntomas anteriormente consignados, y luego multiplíquenlo por dos o por tres o por el número que ustedes quieran y van a tener una pálida idea de lo que estoy hablando.

Algo que sí me molesta bastante es cuando una se encuentra en “esos días”, y debido a la incomprensión de los demás (generalmente hombres, pero no siempre), una se gana el adjetivo de “histérica”. A esos y esas ignorantes les voy a explicar una cosa, y presten mucha atención así no cometen este error nuevamente: la palabra “histérica” deriva de la palabra latina “hister”, que significa “útero”, y la verdá que yo no tengo la costumbre de sacarme el útero unos días y ponérmelo otros, por lo que soy histérica todos los días, desde que nací por lo menos y si es posible, hasta el día que me muera.*

Pero bueno, estos son puros berrinches de alguien que tiene la vida medianamente solucionada como para tener tiempo y ganas de pensar y escribir sobre estas cuestiones: un berretín burgués.

Y la verdá que prefiero y agradezco poder quejarme de estas cuestiones, antes que no saber lo que es una menstruación, como le pasa a muchas mujeres que empiezan a parir cuando aún son niñas y quedan embarazadas cada diez u once meses, hasta que el cuerpo les dice basta.

Así que: ¡Viva la menstruación! ¡Viva el SPM! ¡Salud a todas las histéricas!

Les dejo un video de Liliana Felipe, histérica orgullosa y genia total.






*
Parece que en psicología la palabra “histérica” tiene otras connotaciones, pero por motivos de conveniencia, y para que el artículo me quede bien, no las incluí. De última el blog es mío y escribo lo que quiero. Agradezcan que por lo menos les aviso que les estoy ocultando información. Eso en otros lados no sucede...

domingo, 11 de enero de 2009

Las Gracias otorgadas por el Sacrosanto Veto de San Tabaré el Altísimo


Dejé pasar algunas semanas, a ver si se tranquilizaba la cosa y si se me pasaba la indignación. Pero no, no se me pasó.

Pero el tiempo me dio la oportunidad de reflexionar, y esa reflexión ha iluminado mi conciencia y mi corazón, y una verdad me ha sido revelada.

Es así que, queridos feligreses, aquí les hago llegar las Tablas de la Gracia Infinita de San Tabaré el Altísimo, que a través de su Sacrosanto Veto guía nuestro camino, nos libra de todo mal y no nos deja caer en tentación. Como podrán apreciar, las Gracias están divididas según clase social, como para que no existan confusiones tanto en la Tierra como en el Cielo. Amen.

Para las pichis atorrantas de los cantegriles

Para la gente bian como una

El aborto es ilegal, y podés ser procesada vos, la vieja que te lo hace, la ramita de perejil y hasta el loro.

El aborto es ilegal, pero el médico titulado por la UdelaR, que vive en Pocitos o Punta Gorda, tiene suficiente guita como para sobornar a los jueces y las autoridades y que su clínica clandestina siga funcionando lo más campante.

Si todo funciona bien, si Dios y la Virgen quieren y si tenés suerte, la infección se te cura en unos pocos días. Eso si no hacés una sepsis y reventás como un sapo. Por las dudas prendé una vela.

Si todo funciona bien, al otro día ya podés ir a tomar el té con tus amigas, a jugar al scrabble, por no decir que te podés ir de shopping tranquilamente. Por las dudas pedí hora en la peluquería.

¿Y cómo que no querés tenerlo? Hubieras cerrado las piernas, entonces, atorranta… No terminaste la escuela y ya te andás revolcando por ahí… ¿Y qué me importa si no querés tener hijos con el Yeison porque te pega…?

Si, no, me imagino, un hijo ahora hubiera sido una calamidad… Todavía te quedan dar dos materias para recibirte en la Católica, y a tus papis le quedan tres cuotas de tu Mini Cooper… Y además andás mal con Humberto…

¿Te arrepentiste? ¿Te sentís culpable? Jodete y callate la boca, no vaya a ser que encima caigas en cana… Y de última, eso se arregla con otro hijo…

¿Te arrepentiste? ¿Te sentís culpable? Tengo el número de un psicólogo que es bárbaro… ¿Por qué no vas y hablas con él?


Nota de la autora: Lo de "pichi atorranta" y "gente bian" son meras estereotipaciones con el único fin de provocar algún tipo de reflexión en el/la lector/a. No representan en absoluto la forma de pensar de quien suscribe, y están hechas desde el humor, como el resto del artículo, si es que este tema se puede tomar con un poco de humor. Espero que los y las lectores/as entiendan el sarcasmo y la ironía; de otra forma, estamos frit@s. Salud.

lunes, 5 de enero de 2009

Matemáticamente, ¿tenemos chance?


Tengo una suerte bárbara. Mis amigos escriben artículos en sus blogs, e involuntariamente me brindan material para que yo escriba en el mío. Leyendo esta entrada del blog de mi amigo Daritxo, me quedé pensando en algo que me pareció interesante: el tema de las almas gemelas. Es cierto, Daritxo no habla nada sobre las almas gemelas, pero por alguna razón, mis pensamientos se desviaron por ese lado.

La cuestión es así: el concepto de “almas gemelas” es muy poético y esperanzador; se supone que cada un@ de nosotr@s tiene un alma gemela, una “media naranja”, un “amor de mi vida”, con el que vamos a vivir felices para siempre comiendo perdices (no en mi caso, prefiero las milanesas de soja). Hasta acá todo muy lindo.

Ahora, se plantean varios dilemas que podrían hacer al menos tambalear la creencia en la existencia de tal cosa.

Para empezar, si un@ no cree en la existencia del alma, no tiene sentido creer en la existencia de las almas gemelas. Pero supongamos que creemos en la positiva existencia de alma (ya lo veo al amigo Ptolmes arrancándose canas verdes).

El segundo problema que se plantea es encontrar a esa alma gemela, lo cual no es fácil. Según la Wikipedia, la superficie de la Tierra es de 510.065.284,702 km2 (igual pido que el amigo Ptolmes lo confirme). Sobre esa superficie convivimos alrededor de siete mil millones de almas, y esa cifra sigue en aumento. Así que ¿por qué cuernos mi alma gemela iba a vivir en el mismo barrio, o en la misma ciudad, o en el mismo país, o siquiera en el mismo continente que yo? Proporcionalmente, el alma gemela de la mayoría de nosotr@s tendría que ser la de un/a asiátic@. Esto sin tomar en cuenta la posible existencia de vida extraterrestre inteligente que pudiera a llegar a haber por ahí diseminada en el universo, y no nos vamos a poner xenofóbicos; ¿qué tiene un alma terrícola que no tenga una extraterrestre?

En tercer lugar, y suponiendo la afortunada casualidad de que un@ encuentre su alma gemela, estaría bueno que semejante hallazgo no pase inadvertido ante nuestros ojos. Y a veces un@ vive tan distraíd@ con asuntos mundanos…

También estaría bueno que esa persona que creemos nuestra alma gemela crea lo mismo de nosotr@s; es decir, que no crea que su alma gemela sea un/a tercer@, porque ahí el tema de comer perdices o milanesas de soja para siempre se entra a complicar… Si un@ cree fervientemente que su alma gemela es Fulan@, y resulta que viene Mengan@ a tratar de convencernos de lo contrario, y además se postula como nuestra única y verdadera alma gemela, difícilmente le creeremos. Digo difícilmente y no imposiblemente…

Pero bueno, todos estos son detalles menores. Tal vez algun@ de nosotr@s sea un@ de es@s poc@s afortunad@s que encuentran a su alma gemela y viven felices para siempre, y para muestra basta un botón…

Yo por ahora me conformo con vivir agradecidamente enamorada del que yo creo fervientemente es mi alma gemela, que no es poco, dadas las posibilidades…


De Zoster, culebrillas y malas palabras.


Todo empezó con una ronchita chiquitita en la panza, tirando para el lado derecho. Ni me preocupé; “me picó un bichito, o el perfume del jabón me dio alergia, nada de qué preocuparse”, pensé.

La cuestión es que la ronchita me picaba de vez en cuando, pero cuando me rascaba -cosa inevitable para mí, sobre todo porque rascarse es verdaderamente placentero- me dolía bastante.

Al otro día la ronchita se agrandó, y no solo eso: encontré nuevas ronchitas, o mejor dicho, nuevas ampollitas minúsculas, coloraditas, también en la panza y en la espalda, más o menos a la misma altura.

Le pregunté a mi suegra, que es doctora, a ver si tenía idea de qué podía ser eso (debo reconocer que las ventajas de tener un médico en la familia son numerosas, y no dudo en aprovecharlas). Me dijo que podía ser el “herpes Zoster”, a lo que yo, con mi nulo conocimiento en estas cuestiones, la quedé mirando con cara de “¿Y cuánto me queda?”. “La culebrilla. Se ve que andás con las defensas bajas...”, me dijo

La culebrilla. Y yo que pensaba que la vieja y querida culebrilla era un invento de las viejas y las curanderas que siempre decían “¡Que no se te junte la cola con la cabeza porque TE MORÍS!”. Igual, cuando me hablaban de la culebrilla, yo me imaginaba que la gente que la padecía tenía dentro de su organismo una especie de parásito largo y blancuzco, alimentándose de andá a saber qué fluidos o humores asquerosos, que se iba alargando hasta que le daba toda la vuelta y se le juntaban la cola y la cabeza.

Resulta que al final, y previo consejo de mi suegra, fui a ver al médico para que me dieran un retroviral o algo de eso, porque además aprendí que el tema del Zoster tiene algo que ver con la varicela que tuve a los catorce años, y que me contagié a propósito, pero ésa es otra historia…

El médico que me atendió era un muchacho joven que hablaba muy rápido, por lo que algunas cosas no le entendí. Ahora, durante la consulta se suscitó un pequeño diálogo, en la que surgió una palabra que yo nunca pensé que iba a escuchar de un médico en medio del ejercicio de su profesión (no me sorprendería escucharla, dicha por la misma persona, en ámbitos menos formales). Transcribo el diálogo:

Doctor: ¿Y te pica?

Yo: Sí, pero no mucho, en momentos puntuales, no me pica todo el tiempo…

Doctor: Ta, pero cuando te rascás te duele hasta el orto, ¿no?

Yo: …ejem ... eh... sí…

Y bueh, resulta que ando con las defensas bajas, producto del estrés de estos últimos días; el lunes tuve un examen y la verdad que lo pasé bastante mal, psicológicamente hablando, y por eso se me manifestó la culebrilla.

Ahora estoy tomando remedios cada seis horas y esas cosas, y de vez en cuando me rasco, y me duele hasta el orto…

La vida no es un carnaval.


¿No les ha pasado de encontrarse por la vida con alguna persona que siempre está contenta, que siempre parece estar feliz? A mi si.

Eso no sería tan grave. Está bueno que la gente sea feliz. No tengo nada contra eso.

Ahora, lo que me molesta es que hay algunas personas que siempre están contentas y que esperan lo mismo de uno.

Hablando con un amigo muy querido surgió la siguiente idea: la vida no es un carnaval, muy a pesar de Celia Cruz. A veces uno está triste o angustiado, y eso es perfectamente normal. Si no estuviéramos tristes de vez en cuando, seríamos una piedra, o no nos importaría nada, o tendríamos un problema de negación bastante importante.

De todas formas, creo que hay razones y razones para estar triste. En mi caso personal, creo que si mi cuadro preferido pierde una final, o si pierdo un examen, por citar algunos ejemplos, ésa no es razón suficiente para tirarme a llorar en una cama.

Pero hay otras razones mucho más fuertes para estar tristes. Razones que pueden encontrar su origen en cuestiones más o menos globales, como la miseria, la injusticia, la guerra; o en cuestiones más personales, como la muerte de un ser querido, el fracaso de una pareja, o el íntimo descubrimiento de la propia condición de mortal, que a pesar de ser algo bastante obvio, no es poca cosa.

Lo que he notado, y más de una vez, es que hay como una “campaña” en contra de algunos sentimientos como la tristeza; como que la tristeza tiene mala prensa. Pereciera que uno siempre tiene que estar bien, siempre tiene que estar feliz y contento. Como que uno no tiene derecho a estar triste, enojado, angustiado. Como que los únicos sentimientos que deberían tener cabida en nuestra vida son los “positivos”. Y esto es muy fácil de notar: hay que prender la tele. En las publicidades nunca vamos a ver a alguien triste; o como mucho, si hay alguien triste, deja de estarlo cuando compra el producto o servicio que se está publicitando. En las telenovelas, por ejemplo, a la heroína le toca vivir las mil y una, llora devastada por su amor, sufre las crueldades de la villana… pero al final termina casada con su verdadero amor, felices y comiendo perdices. O nomás cuando nos encontramos por la calle con algún conocido que, como saludo, nos pregunta “¿Todo bien?”.

¿Y qué pasaría si digo que no? ¿Qué pasaría si dijera que estoy triste, que no está todo bien? ¿Cómo reaccionaría esa persona? Hay que hacer el experimento.

Creo que tampoco se trata de ir por la vida quejándose y estando triste por todo. Calculo que cada uno de nosotros tiene algo en la vida por lo que estar contento, orgulloso, agradecido, y está bueno darse cuenta que uno tiene esas cosas. Y obviamente que cuando la tristeza pasa a ser depresión, lo más acertado es consultar con alguien que nos pueda ayudar.

Pero por lo demás, creo que es muy importante permitirse sentir todo y no sucumbir a la perpetua felicidad impuesta de afuera, como si todo estuviera bien, como si todo fuera color de rosa. Creo que todos los sentimientos son válidos; la cuestión es qué hacemos con esos sentimientos, cómo los manejamos.

Así que ya saben: no estoy triste, pero cuando lo esté, no me vengan a ofrecer pañuelos para que me seque las lágrimas. Déjenme estar triste y llorar tranquila.

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Oda a Peter Capusotto


Bueno, en realidad no es una oda, porque no tengo la menor idea de cómo escribir odas. Más bien es un humildísimo reconocimiento al trabajo que hace Diego Capusotto en su programa “Peter Capusotto y sus videos”. Para quienes aún no lo vieron, que a esta altura deben ser pocos, este programa se emite por Televisión Nacional (o Canal 5) los domingos a las 22:00 horas.

Es un programa divertidísimo, al menos para mí. Cultiva un humor casi absurdo, sin sentido, aunque no me parece para nada absurdo que sus personajes nos hagan reír. Los más sobresalientes, para mi gusto, son Pomelo, Juan Carlos Pelotudo, Bombita Rodríguez, Fabián Crema y Quiste Sebáceo, por no hablar del mismísimo Peter Capusotto, que hace las presentaciones de cada personaje. Un crá. La verdad que hacía pila que no me reía tanto con un programa de televisión.

Pero más allá de todos estos personajes tan graciosos, lo que hace este programa a través de los videos que emite (y de ahí su nombre), es acercarnos a un montón de bandas, grupos, músicos y afines generalmente desconocidos por la gran mayoría de la gente (entre la que me incluyo) y que están buenos de verdad. Y aunque no estuvieran buenos, aunque no nos gustaran, está buenísimo tener la oportunidad de conocerlos y poder decir “No me gusta, me parece una cagada” o “Ta, me voló la cabeza, me cambió la vida. Después de haber visto y escuchado a esta banda me puedo morir feliz”.

Y además, creo que es la primera vez en muuuuuucho tiempo (en relidad no se si no es la primera vez en la historia) que estos tipos de bandas, estos músicos y sus composiciones tienen un lugar en la televisión abierta de este país. Ayer nomás, pasaron a Patti Smith y Sumo, por nombrar a dos de los más conocidos.

Y no me importa si el programa es argentino. Es bueno, difunde mucha música desconocida para la mayoría, hace un trabajo cultural importantísimo, muy a pesar de muchos nacionalistas chotos que andan por ahí diciendo que nada bueno puede venir de Argentina, que su televisión es una mierda y que “los porteños bla, bla, bla”. A ésos debo recordarles que el programa de Tinelli es el más visto en Uruguay. Eso no quiere decir que sea bueno ni nada por el estilo; solo quiere decir que hay gente que lo mira, y tal vez más gente de lo que nos gustaría admitir…

Nada más. Mis congratulaciones, si alguna vez le llegan, para Capusotto, Diego o Peter, no se dónde está la línea divisoria...

What went wrong?


Para empezar debo aclarar que no tengo formación religiosa alguna, pero por cuestiones sociales y geográficas que no es necesario explicar demasiado, la religión que tengo más a mano es la de la Iglesia Católica Apostólica Romana. Mis padres son ateos y nunca me inculcaron ninguna creencia, nunca fui bautizada, nunca fui a catecismo, y todo lo que sé sobre esta religión (que no debe ser mucho, por supuesto) lo aprendí hablando con gente que profesa esta fe, hablando con gente que no profesa esta fe pero que sabe kilos, leyendo e investigando por mi cuenta. Así que no ofrezco ninguna garantía, y todo aquel que quiera refutar alguna de mis proposiciones, será bienvenido.

En estos últimos días he estado releyendo los Evangelios, intercalándolos con “Huckleberry Finn”, “La Duquesa de Malfi”, “Rayuela” “Ode to the West Wind” y alguna otra cosa.

Todo muy lindo. La vida de Jesús, agitada, interesante, digna del Hijo de Dios. Sus enseñanzas, discutibles unas, compartibles otras.

A partir de esta línea, le voy a pedir al lector no cristiano que aplique la Gran Coleridge: “that willing suspension of disbelief”. El lector no cristiano deberá suspender su descreimiento, reprimir su sentido crítico, contener su razón, aceptar y creerse por lo menos hasta el final del artículo que Jesús realmente existió, que enseñó y que fue un hombre muy importante para la historia de la humanidad, más allá de su condición mortal o divina, que no vamos a discutir aquí (parece que eso ya se discutió hace como mil setecientos años, en Nicea).

¿Listo? ¿Somos todos creyentes? ¿Estamos todos seguros de la existencia de Jesús? Tenemos que estar todos seguros, sino el resto del artículo se me va al carajo. Bueno, muy bien. Continuemos.

Como venía diciendo, Jesús tuvo una vida bastante agitada. Nacido de refugiados en Belén, a los pocos días ya lo venían a visitar unos supuestos reyes, trayéndole regalos carísimos. A los trece años ya andaba enseñándoles a los sacerdotes de la época (mojándoles la oreja, bah), anunciando la Buena Nueva. Veinte años más tarde, y después de haberse caminado unos cuantos kilómetros (sobre el agua, incluso) era crucificado por los soldados romanos, con la anuencia de los sacerdotes del pueblo judío y previa lavada de manos de Pilatos. De todas formas, no me interesa centrarme en el episodio de la crucifixión. Ya lo hizo Mel Gibson, y le salió sangrientamente bien.

Lo que sí me interesa son las enseñanzas de Jesús, y cómo mierda hizo la Iglesia Católica Apostólica Romana (y algunas de las protestantes) para hacer todo lo contrario de lo que su Mesías enseñó como lo bueno y lo verdadero, y seguir llamándose seguidores de Jesús.

Por ejemplo, en el Evangelio según San Mateo, en las Bienaventuranzas, Jesús dice, entre otras cosas: “Felices los que trabajan por la paz, porque serán reconocidos como hijos de Dios” (Mateo 5:9). ¿Y la Iglesia qué hizo? Guerra Santa, además de financiar otras guerras no tan santas.

También en Mateo, Jesús predica: “No se hagan tesoros en la tierra, donde la polilla y el gusano los echan a perder y donde los ladrones rompen el muro y roban.” (Mateo 6:19). ¿Y qué hizo la Iglesia? Forró templos con oro robado de América, y se armaron la Banca Vaticana.

Con respecto al hambre y la necesidad, dice Jesús en el Evangelio según San Marcos: “¿Nunca han leído ustedes lo que hizo David, cuando él y sus compañeros tuvieron necesidad y sintieron hambre? Que entró en la Casa de Dios, en la época del Sumo Sacerdote Abiatar, y comió los panes de la ofrenda, que solo pueden comer los sacerdotes, y les dio también a los que estaban con él” (Marcos 3:25) ¿Y qué hace la Iglesia? Deja morir de hambre a millones, mientras sus jerarcas viven en la opulencia y el lujo.

Otra vez en Marcos, Jesús dice: “¡Qué difícilmente entrarán en el Reino de Dios los que tienen las riquezas!” (Marcos 10:23). Y más adelante sigue: “Es más fácil para un camello pasar por el ojo de la aguja, que para un rico entrar en el Reino de Dios” (Marcos 10:25). Sin palabras.

Bueno, suficiente.

Ahora es cuando yo me pregunto: “What went wrong?”. ¿Qué salió mal? ¿Qué fue lo que no entendieron? ¿Qué duda les quedó? Ah, yo no se ustedes, pero esto a mi me extraña sobremanera.

Ahora, si aceptan el desafío, les propongo a ustedes hacer su propia revisión de los Evangelios, si es que les gusta el ejercicio. Digo, pa que la próxima vez no nos tomen por estúpid@s.

Wanda Nara quiere un Mercedes


Voy a hacer un experimento. Voy a comprobar si el año que hice en Ciencias de la Comunicación sirvió para algo, si aprendí algo. Voy a hacer lo que hacen todos los medios de comunicación: voy a desviar la atención del público.

Primero, y como habrás visto, “lector desprevenido”, he elegido un título que llame bien la atención.

Listo, ya capté tu atención.

A continuación procederé a distraer tu atención de las cuestiones más o menos importantes que abruman tu día a día: ¿Quién soy? ¿De dónde vengo? ¿A dónde voy? ¿Me dará el gasoil para llegar hasta ahí? ¿Qué hay después de la muerte? ¿Existe un más allá? ¿Qué ruta me conviene para llegar? ¿Hay vida en Egipto? ¿Lennon o McCartney? ¿Lennin o McCarthy? Y una larga lista de etcéteras.

Te preguntarás cómo voy a hacer para distraer tu atención, siendo que eres una persona tan inteligente, leída, crítica e informada.

Muy fácil: te voy a dar para leer cualquier noticia chota:

Wanda Nara quiere un Mercedes

La vedette pasa sus días de embarazo en la casa que tiene junto a su marido Maxi López en Moscú y como está cansada de salir de shopping, ahora elige sus futuras compras por catálogo. El futbolista por supuesto le concede todos los antojos.

Wanda Nara y Maxi López se casaron meses atrás en Argentina y luego partieron rumbo a Moscú en donde el futbolista está desarrollando su carrera.

La vedette, que va de vez en cuando a Buenos Aires a visitar a sus padres, decidió que no piensa trabajar hasta después del parto, y es por eso que le dedica mucho tiempo a sus antojos y pasa el tiempo pensando que nuevo chiche le puede pedir a su marido.

Días atrás, mirando una revista en su casa, porque ya no sale de shopping sino que elige lo que quiere comprar por catálogo, la rubia vio un auto que le encantó y decidió instantáneamente que quería uno igualito al de la foto.

Cuando llegó Maxi, su reciente esposa le comentó cuál era su nuevo antojo. Wanda había elegido una coupé Mercedes Benz SLR McLaren, uno de los autos más caros del mundo.

Como no podía ser de otra manera, Maxi dijo “Sí, mi amor” y comenzó las averiguaciones para encargarlo, al parecer el auto es tan exclusivo que se compra sólo por catálogo. (primiciasya.com)

Ya está. Ya leíste la noticia. No hay vuelta atrás. Por al menos unos minutos tu atención estuvo distraída de las cosas realmente importantes de la vida y quedó captada por esta noticia acerca de los caprichos de Wanda Nara.

Ah… ya me siento toda una mujer de los medios, una Blanca Rodríguez, una Rosario Castillo. Qué placer. Es como un cosquilleo en la panza, en las manos, en los pies… Ah no, eso del cosquilleo en las extremidades me asusta un poco…

¿Me estaré por morir? ¿Cómo y cuándo me voy a morir? ¿Hay vida después de la muerte? ¿Reencarnaré en alguna alimaña o en un ser humano? ¿O me iré al cielo? ¿O al infierno? ¿Hay videt en los baños del más allá o es como cuando uno se va de camping? ¿Serán muy caros los alquileres?

Puta madre. No hay caso. Estoy abrumada por la duda.

¿Que Wanda Nara qué? Pero andate a la puta que te parió…

Culo solidario


Estos últimos días he estado en obra. He estado ayudando a acondicionar la nueva casa de mi pareja antes de que se mude, lijando, pintando, ensuciándome, limpiándome con aguarrás (que te destroza la piel), ensuciándome de vuelta, y así.

Y en estos días se me ha revelado, cual llama que ilumina mi conciencia, una verdad inobjetable.

Durante prácticamente toda mi existencia conciente ha habido una pregunta, una cuestión que me ha intrigado grandemente: ¿por qué cornos a los plomeros, electricistas, obreros, pintores y afines se les ve el culo cuando están agachados o de rodillas durante la realización de sus diversos menesteres? ¿Es que no se dan cuenta? ¿Es que no les importa? ¿Es que han perdido todo rastro de vergüenza? ¿Es que no han superado la etapa anal exibicionista?

Nada de eso.

La verdad que he comprendido en estos días es que esta infamia es inevitable.

Es humanamente inevitable e imposible mantener los pantalones en una posición tal que cuando un@ se agacha no se asome, tímida o escandalosamente, lo que alguien ha dado en llamar “la sonrisa vertical”.

Es imposible.

Durante la última semana he subido mi pantalón al menos unas cien veces, y se ha vuelto a caer otras tantas veces más. Durante la última semana he llevado mi pantalón casi a la altura de mi cintura, lo cual es bastante incómodo, teniendo en cuenta que el pantalón en cuestión es de tiro medio (no quiero ni pensar qué hubiera pasado si fuera de tiro bajo). Durante la última semana he ajustado mi cinturón decenas de veces, hasta casi cortar la circulación de mi sangre.

El resultado: el pantalón siempre se volvió a bajar. Siempre. Todas y cada una de las veces. Todas y cada una de las veces terminé luciendo al menos unos centímetros de mi “sonrisa vertical”, para escándalo mío y divertimento de las demás personas que me acompañaban en esta empresa, entre ellas, mi pareja.

Es por eso que hoy hago llegar mi solidaridad a todos esos obreros, plomeros, electricistas, pintores y demás que se han dado por vencidos y han resignado toda esperanza de resguardar su privacidad del resto del mundo. Yo estoy con ustedes. Yo comprendo vuestra desazón. Yo comparto vuestra decisión de no luchar contra algo que es mucho más grande y poderoso que un@ mism@.

¡Arriba las rayas de los culos del mundo!

¡No nos moverán!

¡Los culos unidos jamás serán vencidos!

¡Por autonomía y cogobierno de todas las sonrisas verticales!

¡Anarquía es orden, y que a un@ se le vea el culo cuando pinta agachad@ es inevitable!

¡Salud!

Otra cosa: ojalá el mío fuera tan lindo como el de la muchacha de la foto...Si así fuera, ya estaría yo haciendo fortunas en "Mostrando el Culo por un Sueño".

El berretín burgués llevado a canción



Alejandro Dolina dice (o hace decir a uno de sus personajes de los "Radiocines") que "es un prejuicio burgués el que uno tenga que elegir". Me pareció que esta canción de Liliana Felipe lleva ese prejuicio a su máxima expresión, de manera muy graciosa, pero también denunciado una realidad terrible. Espero que les guste. Más abajo está el video.

Tienes que decidir

Tienes que decidir
Quién prefieres que te mate:
Un comando terrorista
O tu propio gobierno para salvarte
Del comando terrorista

Tienes que decidir
Qué prefieres que te mate:
La pobreza, la miseria,
El Tratado de Libre Comercio
O el programa contra el hambre

Ya se acabó aquel tiempo
En que decidían
Cómo nos mataban
Y sin preguntarnos siquiera
Por pura cortesía
Si era nuestro deseo
El de fenecer
Como los mosquitos
Al amanecer
O morirnos de sed

Ya nos mataron de tantas maneras
Ya nos cansamos de ir al panteón
Ya no sabemos si somos civiles,
Rehenes, vampiros o simples mortales
Pero de tanto morirnos
Al menos nos hamos ganado el derecho de decidir
Cómo queremos morir

Tienes que decidir
Cómo prefieres morir:
De hambre natural
De asco terminal
De pago de Predial
Ahorcada con tu chal
Debiendo un dineral
Cruzando de ilegal

Ya se acabó aquel tiempo
En que decidían
Cómo nos mataban
Y sin preguntarnos siquiera
Por pura cortesía
Si era nuestro deseo
El de fenecer
Como los mosquitos
Al amanecer
O morirnos de sed

Ya nos mataron de tantas maneras
Ya nos cansamos de ir al panteón
Ya no sabemos si somos civiles,
Rehenes, vampiros o simples mortales
Pero de tanto morirnos
Al menos nos hamos ganado el derecho de decidir
Cómo queremos morir